Tras la dolorosa derrota en Brasil por la Copa Libertadores, Colo Colo regresa a Chile inmerso en una profunda crisis futbolística. Sin tiempo para lamentos, el equipo albo se enfrenta a una seguidilla de encuentros que definirán su futuro en diversas competiciones. Estos partidos, verdaderas “finales” para el Cacique, exigen una rápida reacción y un cambio de rumbo urgente.
Los partidos que se vienen para el equipo albo
El primer desafío crucial se presenta este sábado 10 de mayo en Quillota, donde Colo Colo visitará a Deportes Limache por la definición del segundo lugar del Grupo B de la Copa Chile. Este encuentro es un todo o nada: una victoria o un empate sellarían el pase a octavos de final, mientras que una derrota significaría una eliminación temprana del torneo.
La exigencia no cesa, ya que el miércoles 14 de mayo, el equipo de Jorge Almirón deberá viajar a Argentina para enfrentarse a Racing Club por la Copa Libertadores. En un grupo donde Colo Colo se encuentra en la última posición, este partido es vital para mantener alguna esperanza de avanzar a la siguiente ronda o, al menos, aspirar a un cupo en los playoffs de la Copa Sudamericana.
De vuelta en el ámbito local, el lunes 19 de mayo Colo Colo recibirá a Ñublense en un duelo crucial por la Liga de Primera. Necesitado de sumar puntos para escalar posiciones y evitar complicaciones con la zona de descenso, el equipo deberá mostrar una cara diferente ante su público.
La seguidilla de partidos en casa continuará el sábado 24 de mayo con la visita de Unión Española, otro encuentro fundamental para enderezar el rumbo en el campeonato nacional.
Finalmente, el jueves 29 de mayo, el Estadio Monumental será el escenario del último partido de la fase de grupos de la Copa Libertadores, donde Colo Colo se medirá ante Atlético Bucaramanga. Para entonces, el panorama en el torneo continental podría estar más claro, pero seguramente este encuentro representará la última oportunidad para luchar por un cupo en la siguiente fase o en la Copa Sudamericana.
Mayo se presenta como un mes definitorio para Colo Colo. El equipo deberá afrontar cada partido con la mentalidad de una final, buscando revertir el mal momento y encauzar su camino tanto en las competiciones nacionales como internacionales.
