Tras la histórica y vergonzosa eliminación de Colo Colo en Copa Chile frente a Deportes Limache por un contundente 4-1, el técnico Jorge Almirón ha tomado medidas drásticas de cara al importante compromiso contra Racing por Copa Libertadores.
El entrenador decidió cancelar el día de descanso programado para este domingo, obligando al plantel a entrenar para aprovechar al máximo los días previos al viaje a Argentina, programado para el lunes.
No hay descanso para jugadores solo entrenamiento
Esta decisión refleja la crítica situación que atraviesa el equipo chileno, que acumula tres partidos consecutivos sin conocer victorias en un momento decisivo de la temporada. Justo cuando el club celebra su centenario, año en que se esperaba disputar todos los títulos posibles, el rendimiento ha sido muy inferior a las expectativas.
En Copa Libertadores, el panorama es especialmente complicado. Colo Colo se encuentra en el último lugar del Grupo E con apenas dos puntos, muy lejos de los siete que ostentan los líderes Racing y Fortaleza. El tercer puesto lo ocupa Bucaramanga, que actualmente estaría clasificando a Copa Sudamericana. Esta posición en la tabla obliga al Cacique a conseguir una victoria en Argentina si quiere mantener alguna opción de clasificación.
DT bajo intensa presión
El propio Almirón está bajo intensa presión, consciente de que otra derrota podría costarle el puesto. Sus números en la temporada 2025 son preocupantes: en 17 partidos oficiales ha conseguido apenas 5 victorias, con 5 empates y 7 derrotas, registrando 21 goles a favor y 24 en contra.
El equipo argentino también viene de un traspié tras quedar eliminado de la definición de la Liga Profesional Argentina, por lo que centrará todos sus esfuerzos en la competición continental. El encuentro entre Colo Colo y Racing está programado para el miércoles 14 de mayo a las 20:30 horas.
Para el Eterno Campeón, este partido representa mucho más que puntos en la tabla: significa una oportunidad para demostrar amor propio, recuperar confianza y evitar que el año de su centenario, que debía ser de celebración, se convierta en una verdadera pesadilla deportiva.
