Sebastián Vegas llama a cerrar la boca y aceptar la crítica
Tras la contundente derrota de Colo Colo por 4-0 frente a Racing en Argentina, Sebastián Vegas fue uno de los pocos jugadores que dio declaraciones públicas. El defensor, cuyo rendimiento sigue siendo cuestionado desde su llegada desde Monterrey, realizó una fuerte autocrítica sobre el momento actual del equipo.
Sebastián Vegas llama
Vegas hizo un llamado a la unidad interna, enfatizando que “cuando pasan este tipo de resultados y las cosas no te salen, es cuando más hay que trabajar, cerrar la boca, aceptar la crítica y seguir unidos”. También pidió disculpas a la hinchada, calificando el resultado como “una vergüenza” y destacando la necesidad de comprometerse a mejorar por tratarse de “un equipo grande”.
Respecto a la situación del técnico Jorge Almirón, cuya continuidad está en duda tras esta nueva goleada, Vegas comentó que el entrenador sigue comprometido con el plantel, aunque reconoció que su permanencia “ya no depende de nosotros”. El defensor también lamentó que el equipo estaba haciendo “un buen partido hasta el primer gol de ellos”, a pesar de que él mismo tuvo responsabilidad en el segundo gol de Racing.
Frustración por el momento del club
En la misma línea, Mauricio Isla expresó su frustración por el momento del club durante el año de su centenario: “Era un año para vivir una fiesta y estamos viviendo todo lo contrario”. El Huaso coincidió con Vegas al afirmar que hay “jugadores de jerarquía y experiencia, pero eso no se refleja mucho en el campo”, insistiendo en que deben “estar callados y sacar esto adelante”.
Isla también reconoció que al equipo le quedan pocas opciones de seguir compitiendo por el campeonato chileno, admitiendo que “había tres competiciones en las que podíamos luchar y nos salió todo al revés”.
El próximo desafío de Colo Colo será enfrentar a Ñublense el lunes en el estadio Monumental, donde se espera un ambiente tenso. El equipo necesita urgentemente sumar puntos para superar esta crisis, mientras la continuidad de Almirón pende de un hilo.