El sábado en el Estadio Monumental se vivió una jornada cargada de emociones que fue mucho más allá del resultado deportivo. Colo Colo goleó 4-1 a Unión Española, sumando tres puntos importantes para escalar en la tabla de posiciones, pero lo que realmente marcó la tarde fueron los emotivos gestos hacia Jorge Almirón, quien podría estar viviendo sus últimos días como director técnico del club.
El respaldo desde el primer minuto
La emotividad comenzó desde el ingreso al terreno de juego, cuando los hinchas del sector Océano recibieron con aplausos al técnico argentino, quien respondió con un afectuoso saludo. Este gesto inicial anticipó lo que sería una tarde llena de demostraciones de cariño hacia el entrenador.
Durante el partido, los futbolistas demostraron su respaldo al técnico de manera evidente. Tras el penal convertido por Arturo Vidal para el 3-1 parcial, el “King” celebró con sus compañeros pero rápidamente se dirigió al banco para brindar un abrazo al DT. La escena se repitió con mayor intensidad en el 4-1 final de Claudio Aquino, cuando el volante y la totalidad del plantel fueron a festejar con el técnico, llenándolo de abrazos en una muestra colectiva de apoyo.
El momento más conmovedor en la despedida de Jorge Almirón
Una vez que el árbitro pitó el final del encuentro, Jorge Almirón se quedó varios minutos en el terreno para saludar individualmente a cada uno de sus dirigidos antes de dirigirse hacia los camarines. Sin embargo, el momento más emotivo llegó cuando el técnico trasandino salió de la cancha bajo los aplausos de los casi 30 mil fanáticos presentes en la Ruca, provocando su visible emoción mientras se despedía con varios gestos hacia las gradas.
A pesar de que los gestos del técnico parecían confirmar su despedida, la dirigencia de Blanco y Negro aún no logra cerrar un acuerdo definitivo con su representante. Las negociaciones siguen en un tira y afloja, principalmente por temas económicos, aunque se espera que la situación se resuelva en los próximos días. Mientras tanto, queda la imagen de una despedida emotiva que mostró el cariño mutuo entre Almirón, sus jugadores y la hinchada colocolina.
