22 años del histórico debut goleador de Iván Zamorano en Colo Colo
El 9 de febrero de 2003, hace exactamente 22 años, Iván “Bam Bam” Zamorano cumplió uno de sus mayores sueños al debutar y anotar con la camiseta de Colo Colo. El legendario delantero chileno, quien había brillado en clubes como Real Madrid e Inter de Milán, decidió unirse al equipo de sus amores en un momento particularmente difícil, cuando el club atravesaba una crisis financiera.
Debut goleador de Iván Zamorano en Colo Colo
Zamorano, quien había sido Pichichi en España y figura en Italia, llegó prácticamente gratis al “Cacique” a principios de 2003, en un fichaje que sorprendió al mundo futbolístico. Su llegada fue especialmente significativa para un plantel joven que necesitaba liderazgo tras el retiro de Marcelo Barticciotto.
Su debut no pudo ser más memorable. En un caluroso día en el Estadio Monumental, Colo Colo enfrentó a Audax Italiano en un partido que terminó siendo un festival de goles. El encuentro finalizó 6-4 a favor del equipo local, con Zamorano como gran protagonista.
El primer gol del “Bam Bam” llegó tras una elaborada jugada colectiva que culminó con una asistencia que el delantero convirtió desde el área chica. La celebración fue emotiva, como si fuera un juvenil anotando su primer tanto. Más tarde, en el segundo tiempo, Zamorano ampliaría su cuenta personal con un característico cabezazo, su sello personal durante toda su carrera.
Inicio prometedor con final inesperado
A pesar de este inicio prometedor, la etapa de Zamorano en Colo Colo no tendría el final esperado. Su carrera terminaría abruptamente tras un polémico incidente en Calama que resultó en una sanción del tribunal de penalidades. Sin embargo, este debut goleador quedó grabado en la memoria de los hinchas albos como el día en que una de las mayores figuras del fútbol chileno cumplió su anhelo de vestir y marcar con la camiseta del equipo más popular del país.
La llegada de Zamorano a Colo Colo representó no solo la realización de un sueño personal, sino también un rayo de esperanza para un club que atravesaba momentos difíciles, demostrando el compromiso del jugador con el equipo de sus amores incluso en circunstancias adversas.