Barticciotto critica respaldo tardío de jugadores de Colo Colo a Almirón
Marcelo Barticciotto lanzó una dura crítica contra el plantel de Colo Colo por su forma de respaldar al técnico Jorge Almirón, tras la victoria 4-1 sobre Unión Española. El ídolo albo cuestionó la autenticidad del apoyo mostrado por los jugadores durante el partido.
El gesto que generó polémica
Durante el encuentro ante Unión Española, los futbolistas del Cacique fueron repetidamente a abrazar a Almirón tras cada gol, en un gesto interpretado como apoyo al entrenador argentino. Esta escena llamó la atención tanto en el estadio como en la transmisión televisiva, especialmente considerando que la dirigencia de Blanco y Negro ya había definido la partida del técnico.
La crítica de Barticciotto al respaldo tardío de jugadores
En el programa ESPN F90, Barticciotto expresó su sorpresa por este respaldo tardío: “Como me sorprende que, en un partido haya habido tanto apoyo, y cuando Almirón era verdaderamente cuestionado por la prensa y por los hinchas, yo no encontré ninguna declaración”.
El exjugador cuestionó la falta de declaraciones contundentes cuando el técnico más las necesitaba, antes de que la dirigencia hiciera público su cuestionamiento.
Cuando Dante Poli recordó que Arturo Vidal y Esteban Pavez habían defendido al técnico tras el partido con Racing, Barticciotto fue enfático en su respuesta: “¿Vidal no respaldó cuando dijo que pongan a los mejores? ¿Eso es respaldar a un técnico?”.
Para el campeón de la Copa Libertadores 1991, las declaraciones de Vidal fueron insuficientes, ya que solo se hizo cargo de la responsabilidad que naturalmente corresponde a los futbolistas.
Lo que esperaba escuchar
Barticciotto fue claro sobre qué tipo de respaldo esperaba: “Que digan la verdad: que el técnico no se tiene que ir, que el técnico está cuestionado y es injusto. Que los que tenemos que estar cuestionados somos nosotros. Eso es una declaración de respaldo verdadero”.
La crítica del ídolo albo apunta a la falta de timing y contundencia en el apoyo, sugiriendo que los gestos en el campo llegaron demasiado tarde, cuando la situación de Almirón ya estaba definida por la dirigencia.