El próximo 22 de mayo, Arturo Erasmo Vidal Pardo cumplirá 38 años. Y aunque sigue más vigente que nunca en las canchas, esta fecha tendrá un aire especial: será la despedida de sus 37 años, una especie de cierre simbólico de un ciclo que termina para dar paso a una nueva etapa. Y como no podía ser de otra forma, la despedida será en Santiago, la ciudad que lo vio nacer y donde hoy defiende al Colo-Colo, el club de sus amores.
Vidal, que ha tenido una carrera llena de gloria en Europa, con títulos y actuaciones históricas con la Selección Chilena, hoy vive un momento especial al estar nuevamente en el Monumental. El regreso al fútbol chileno marcó no solo una reconexión con sus raíces, sino también una nueva etapa personal y profesional, ahora con la madurez de los 37 años que está por dejar atrás.
Más que un cumpleaños, este 22 de mayo es una celebración de todo lo que Arturo representa: garra, entrega, liderazgo y amor por la camiseta. Durante sus 37 años, pasó por la Juventus, Bayern Múnich, Barcelona, Flamengo, Inter de Milán y, por supuesto, por La Roja, donde fue clave en las históricas conquistas de la Copa América en 2015 y 2016.
Pero ahora, lejos de pensar en el retiro, Vidal encara los 38 como un nuevo desafío. Sigue activo, entrenando con fuerza y con la meta clara de seguir ganando con Colo-Colo. “Mientras tenga fuerza y amor por esto, no pienso en parar”, declaró hace poco, demostrando que su fuego sigue más encendido que nunca.
La despedida de los 37, entonces, no tiene lágrimas ni nostalgia — tiene gratitud. Es un cambio de número, pero con el mismo espíritu guerrero de siempre. Arturo se despide de una edad, no de su pasión por el fútbol.
Y será en Santiago, su casa, en el club donde todo comenzó, donde se vivirá esa despedida. Con la camiseta alba, frente a su gente, Vidal seguirá escribiendo historia — ahora como un joven de 38 con alma de 20 y corazón de eterno colocolino.
