Este martes 8 de abril, el mundo del fútbol sudamericano se vistió de luto con la partida de Haílton Corrêa de Arruda, más conocido como Manga, legendario arquero brasileño que falleció a los 86 años tras una larga lucha contra el cáncer de próstata.
Manga fue mucho más que un portero. Fue un símbolo de una época dorada del fútbol sudamericano y un gran compañero de Elías Figueroa, ídolo eterno del fútbol chileno. Juntos, marcaron historia en el Internacional de Porto Alegre, conquistando los primeros títulos brasileños del club en 1975 y 1976, con actuaciones memorables bajo los tres palos.
Antes de su paso por el Colorado, Manga ya era una leyenda en Brasil. Defendió por casi una década al Botafogo, donde ganó cuatro campeonatos cariocas y tres Torneos Río-São Paulo, enfrentando a gigantes como Pelé, Garrincha y Tostão.
Su talento no conoció fronteras. En el Nacional de Uruguay, Manga también brilló, ganando cuatro campeonatos locales y una Copa Libertadores, consolidándose como uno de los mejores arqueros de su generación. Además, jugó en equipos como Sport Recife, Coritiba, Operário-MS, Barcelona de Guayaquil, y hasta fue campeón con Grêmio en 1979, en el mismo Brasil donde comenzó su carrera.
Manga fue también arquero de la selección brasileña, y disputó la Copa del Mundo de 1966. Su trayectoria, marcada por títulos, carisma y liderazgo, lo convirtió en una figura admirada en todo el continente.
Curiosamente, habría cumplido 89 años el próximo 26 de abril, fecha en la que se celebra el Día del Arquero en Brasil, instituido justamente en su honor. Hoy, el fútbol pierde a un gigante, y su amigo Elías Figueroa, junto con millones de hinchas, despide a un hermano de cancha.
