En el fútbol chileno, pocos momentos fueron tan impactantes como el ocurrido en 2021, cuando Colo Colo quedó excluido de la Copa Libertadores. La razón fue clara: una campaña decepcionante en el Campeonato Chileno de 2020 que no le permitió clasificar al torneo continental. Para los albos, acostumbrados a pelear en lo más alto, esta situación fue un golpe inesperado que marcó una de las etapas más complejas de su historia reciente.
Aquel año, Colo Colo no logró estar entre los equipos mejor posicionados en la tabla, y su rendimiento quedó lejos de las expectativas. Rivales como Universidad Católica, Unión La Calera y Unión Española ocuparon los lugares destinados a Chile en la Libertadores, mientras que los albos debieron conformarse con ver la competición desde fuera, algo insólito para el único club chileno que ha ganado la Copa Libertadores, en 1991.
Esta exclusión dejó en evidencia los problemas que venía arrastrando el club en varios aspectos, desde lo deportivo hasta lo institucional. Los hinchas, siempre fieles, exigieron cambios profundos para devolver al equipo a los niveles que su historia y su escudo demandan.
Hoy, en 2025, la situación es completamente distinta. Colo Colo recuperó el protagonismo al consagrarse campeón del Campeonato Chileno en 2024, un título que no solo les devolvió la gloria local, sino que también aseguró su regreso a la Copa Libertadores. Este renacer no solo es motivo de orgullo para la hinchada, sino también una prueba de que incluso en los momentos más oscuros, el club puede resurgir y recuperar su lugar en la élite del fútbol sudamericano.
